Se dice, en botánica, con una muesca o entalladura poco profunda, generalmente en el ápice y las más veces tratándose de hojas; es más frecuente decir escotado. Lázaro, Vocab., pretende establecer cierta diferencia entre escotado y emarginado; emarginado equivaldría a un escotado ligero, poco profundo. Los romancistas, sin embargo, se limitaron a traducir emarginatus por escotado; y Colmeiro, en su vocabulario, no trae este término en castellano.